Tratando con “no se qué hacer hoy”

Ocurre a veces que alguien dice “Ayer hice bla bla bla, pero hoy no tengo la más remota idea de lo que hacer o lo que emprender” (hey, eso último ha rimado).

¿Y ahora qué?

Digamos que Joe y Lisa son los que no saben qué hacer hoy. Si yo soy el Scrum Master simplemente sigo con la reunión y dejo que el siguiente miembro del equipo hable, pero anoto quienes son las personas que no saben qué hacer. Después de que todo el mundo haya hablado, repaso el tablón de tareas con todo el equipo, de arriba a abajo, y me aseguro de que todo esté sincronizado, que todo el mundo sabe lo que significa cada elemento, etc. Invito a todo el mundo a añadir más post-its. Entonces vuelvo a las personas que no sabían qué hacer y les digo “ahora que hemos repasado el tablón de tareas, ¿tenéis idea de lo que podéis hacer hoy?”. Con algo de suerte será así.

Si no, considera si no tienes aquí una buena oportunidad para hacer programación por parejas. Digamos que Niklas va a implementar la interfaz de usuario de administración de usuarios del back-office hoy. En ese caso, sugiero educadamente si quizás Joe o Lisa podrían emparejarse con Niklas para ello. Eso suele funcionar.

Si eso tampoco funciona, este es el siguiente truco:

  • Scrum Master: “OK, ¿quién quiere demostrar la versión beta a todo el mundo?”(suponiendo que ese sea el objetivo del Sprint)
  • Equipo: (silencio confuso)
  • Scrum Master: “¿No hemos terminado?”
  • Equipo: “Um…No”
  • Scrum Master: “Oh, vaya, ¿Por qué no? ¿Qué falta por hacer?”
  • Equipo: “Bueno, ni siquiera tenemos un servidor de pruebas en el que ejecutarla, y el script de compilación no funciona”
  • Scrum Master: “Aham.” (Añade dos post-it más a la pared de las tareas). “Joe y Lisa, ¿Cómo podéis ayudarnos hoy?”
  • Joe: “Um…Supongo que trataré de encontrar algún servidor de pruebas en algún sitio”
  • Lisa: “…Y yo trataré de arreglar ese script de compilación”.

Si tienes suerte, alguien intentará demostrar la versión beta que pediste. ¡Estupendo! Habéis logrado vuestro objetivo de Sprint. Pero, ¿qué pasa si estas a mitad de Sprint? Fácil. Da la enhorabuena al equipo por el buen trabajo que han realizado, agarra una o dos historias de la sección “siguientes” del tablón y colócalas en la columna de “pendiente” a la izquierda. Entonces haz de nuevo el Scrum diario. Notifica al Dueño de Producto que habéis añadido algunos elementos más al Sprint.

Puede ocurrir que el equipo no haya alcanzado aun el objetivo del Sprint y a pesar de ello Joe y Lisa sigan negándose a especificar algo útil en lo que vayan a trabajar. Normalmente considero alguna de las siguientes estrategias. Ninguna de ellas es especialmente agradable, pero ten en cuenta que se trata de un último recurso:

  • Vergüenza: “Bueno, si no tenéis idea de cómo podéis ayudar al equipo os sugiero que os vayáis a casa, o leáis un libro o algo. O simplemente sentaros por aquí hasta que alguien del equipo os pida ayuda”
  • Vieja escuela: Simplemente asígnales una tarea.
  • Presión de los compañeros: Di “sentiros libres de tomaros el tiempo que haga falta, Joe y Lisa, todos los demás simplemente nos quedaremos aquí de pie hasta que se os ocurra algo que pueda ayudarnos a conseguir el objetivo del Sprint”.
  • Servidumbre: Di algo como “Bueno, podéis ayudar al equipo indirectamente siendo sus mayordomos hoy. Traedles café, dadles un masaje, limpiad sus mesas, preparadles algo de comida y cualquier cosa que os pidan durante el día”. Os sorprenderá lo rápido que Joe y Lisa encontrarán algunas tareas técnicas de provecho :o)

Si una persona te fuerza frecuentemente a ir tan lejos, probablemente deberías coger a esa persona en un aparte y hacer algo de coaching en serio. Si el problema continua, necesitas evaluar si esa persona es importante para el equipo o no.

Si no es demasiado importante, intenta que lo aparten de tu equipo. Si es demasiado importante, entonces intenta emparejarlo con alguien que pueda actuar como su “guía”. Joe puede ser un desarrollador y arquitecto estupendo, pero simplemente puede preferir que sean otros los que le digan lo que tiene que hacer. Dale a Niklas la tarea de ser su guía permanente. O hazte cargo tú mismo de esa labor. Si Joe es suficientemente importante para el equipo, merecerá la pena el esfuerzo. Hemos tenido casos como este y más o menos ha funcionado.